Un préstamo personal puede beneficiarle económicamente de muchas maneras. Con él es posible comprar artículos de gran valor, cubrir gastos imprevistos o consolidar deudas.
¿Qué es un préstamo para uso personal?
Lo que se conoce como préstamo personal es una suma de dinero que le concede a usted, el prestatario, un prestamista (un banco, una cooperativa de crédito o un prestamista estatal autorizado). En un plazo de tiempo predeterminado, el prestatario debe devolver el préstamo más los intereses y las comisiones.
La tasa anual equivalente, o TAE, es el importe total que el prestatario debe pagar en intereses y comisiones cada año, lo que se conoce como el costo del crédito. Las comisiones y los intereses están incluidos en la TAE. El costo de pedir dinero prestado, expresado como tipo anual, es el interés. las comisiones asociadas a las solicitudes, las comisiones de tramitación y las comisiones de apertura del préstamo. Las comisiones asociadas al préstamo pueden estar incluidas en la TAE, dependiendo del prestamista y de la normativa estatal. También puede contener otros, como el seguro de crédito. No obstante, estos costos pueden variar en función del prestamista.
Existen dos categorías de préstamos personales:
Préstamo con garantía personal
Para este tipo de préstamo, tiene que pignorar una garantía -su casa, vehículo o cualquier otra cosa de valor- como garantía de que devolverá el dinero al prestamista. Si incumple el pago de un préstamo personal con garantía, el prestamista puede embargar su garantía y venderla para saldar parcialmente la deuda.
Préstamo personal sin garantía
La garantía no es necesaria para un préstamo personal no garantizado. Por lo tanto, en comparación con un préstamo garantizado, las alternativas del prestamista son más limitadas si no puede hacer frente a las cuotas. Este tipo de préstamo suele tener un tipo de interés más alto, ya que el prestamista está asumiendo un mayor riesgo.